jueves, 3 de octubre de 2013

HIPOACUSIA


  La hipoacusia es la incapacidad total o parcial para escuchar sonidos en uno o ambos oídos.
  La pérdida de audición es uno de los problemas de salud crónicos más comunes, afectando a personas de todas las edades, en todos los segmentos de la población y de todos los niveles socioeconómicos. La pérdida de audición afecta aproximadamente a 17 de cada 1.000 niños y jóvenes menores de 18 años. La incidencia aumenta con la edad: aproximadamente 314 de cada 1.000 personas mayores de 65 años sufre pérdida de audición. Ésta puede ser hereditaria o puede ser el resultado de una enfermedad,traumatismo, exposición a largo plazo al ruido, o medicamentos. La pérdida de audición puede variar desde una leve, pero importante disminución de la sensibilidad auditiva, a una pérdida total.

Causas


  La hipoacusia conductiva ocurre debido a un problema mecánico en el oído externo o el oído medio. 
- Puede que los tres minúsculos huesos del oído (osículos) no conduzcan el sonido apropiadamente.
- El tímpano puede que no vibre en respuesta al sonido.  
  Las causas de la hipoacusia a menudo se puede tratar y abarcan
-  Acumulación de cera en el conducto auditivo externo
-  Daño a los pequeñísimos huesos (osículos) que están justo detrás del tímpano
-  Líquido que permanece en el oído después de una infección auditiva 
-  Objeto extraño alojado en el conducto auditivo externo
-  Agujero en el tímpano
-  Cicatriz en el tímpano a raíz de infecciones repetitivas 
  La hipoacusia neurosensorial ocurre cuando las

DESGARRO MUSCULAR


  Un desgarro muscular o tirón muscular es una rotura parcial o completa de las fibras musculares a causa de un fuerte impacto "lesión traumática" . Además de verse afectadas las fibras musculares, también pueden verse afectadas las estructuras circundantes como el tejido conjuntivo que rodea los vasos sanguíneos.
  Sucede por una elongación excesiva "exceder al músculo más allá de su capacidad de estiramiento", por una contracción brusca "veloz", o por realizar un esfuerzo superior a la capacidad biológica de resistencia a la tensión.
  No debe confundirse con "esguince" o "torcedura", que es la lesión de los ligamentos, tejido elástico que mantiene juntos los extremos óseos en una articulación.
Desgarro muscular según sus características
  •   Desgarro miofascial: comprende dos elementos anatómicos, la fascia o aponeurosis y, las fibras musculares periféricas.
  Desgarro fibrilar: generalmente es una lesión de tipo lineal muy fina, de ahí su nombre, con una longitud variable, pero con un grosor que no debería exceder los 2 mm. Ocurre en el espesor de la musculatura.
  Desgarro multifibrilar: variante del anterior, de mayor importancia clínica. Consta de varias lesiones lineales.
  Desgarro fascicular: es una lesión de mayor trascendencia, puede ocurrir en el espesor del músculo o en su periferia, donde se acompañan de compromiso fascial, presenta hematoma.
  Desgarro total: son todas lesiones graves que dejaran algún grado de pérdida de la función, desbalances musculares y grandes cicatrices. Comprenden desde un grueso segmento hasta todo el espesor del músculo.
  Adherenciolisis: apertura de la cicatriz, o redesgarro, generalmente parcial y que ocurre siempre en la zona periférica del desgarro.

Algunas causas que producen un desgarro muscular son:

CALAMBRE



  El calambre es la sensación de dolor causada por un espasmo del músculo involuntario; sólo en algunos casos es de gravedad. Puede ser a causa de una insuficiente oxigenación de los músculos o por la pérdida de líquidos y sales minerales, como consecuencia de un esfuerzo prolongado, movimientos bruscos o frío.
  Los calambres pueden ser muy dolorosos. El estiramiento o el masaje suave sobre el músculo pueden aliviar el dolor. 
Generalmente ocurren después del ejercicio o por la noche y duran desde algunos segundos hasta varios minutos. Es un problema muscular muy común. 
  Los calambres musculares pueden ser causados por el mal funcionamiento de algunos nervios. Algunas veces, este mal funcionamiento se debe a un problema de salud, tales como una lesión de la médula espinal o a un nervio pinzado en el cuello o la espalda. Otras causas son:
* Distensiones o exceso de uso de un músculo
* Deshidratación
* Falta de minerales en la dieta o desgaste de minerales en el cuerpo
* Llegada insuficiente de sangre a los músculos
* Alcoholismo

* Hipertiroidismo-"Tiroides Hipoactiva"

* Insuficiencia renal

* Medicamentos

* Embarazo

Menstruación

Cuidados


  Si usted tiene un calambre muscular, suspenda su actividad y trate de hacer estiramiento y masajear el músculo afectado.
  El calor relajará el músculo cuando el espasmo empiece, pero el hielo puede servir cuando el dolor haya mejorado.
  Si el músculo todavía duele, los antinflamatorios no esteroides pueden ayudar con el dolor. Si los calambres musculares son intensos, su médico puede recetarle otros medicamentos.
  La causa más común de calambres musculares durante la actividad deportiva es

martes, 1 de octubre de 2013

LESIONES DE RODILLA


Las lesiones de rodilla más habituales son las siguientes:



Esguince: uno o varios ligamentos han sufrido un estiramiento excesivo debido a un retorcimiento o una tracción; es posible que el ligamento esté desgarrado o roto.
- Distensión: un tendón o un músculo han sufrido un estiramiento excesivo. 
Daño en el cartílago de la rodilla: el cartílago es un disco con forma de media luna llamado menisco y actúa como "amortiguador" de la rodilla.
- Desgaste por uso excesivo: suele aparecer en las personas practican el ejercicio de correr
  La articulación de la rodilla se compone de hueso, cartílago, ligamentos y líquidos. Los músculos y los tendones ayudan a que la rodilla se mueva en su articulación. Cuando alguna de estas estructuras se lastima o se enferma, surgen los problemas con la rodilla. Los problemas con la rodilla pueden provocar dolor y dificultades para caminar.
Lesiones de los ligamentos de la rodilla:

  Los ligamentos conectan los huesos entre sí. Los ligamentos exteriores de la rodilla, llamados ligamento lateral interno  y ligamento lateral externo, son los que aportan estabilidad a la rodilla y limitan los movimientos laterales.
- El ligamento lateral externo es parecido a un cordón fino y fuerte que se encuentra en la cara exterior de la rodilla y conecta la parte inferior del fémur con la parte superior del peroné (uno de los huesos de la parte inferior de la pierna). Son raras las lesiones de este ligamento por sí solo, pero puede ser necesario repararlo si se tienen dañados otros ligamentos.
- El ligamento lateral interno se encuentra en la cara interna de la rodilla y se tensa al estirar la pierna. Es un ligamento fuerte, pero puede sufrir un esguince o romperse por completo (desgarrarse) si se retuerce la pierna cuando está estirada y, al mismo tiempo, recibe un golpe lateral, como ocurre durante los placajes jugando al rugby o cuando en el fútbol el pie queda fijo en el suelo y la rodilla gira. 

  Las lesiones de los ligamentos laterales interno y externo pueden clasificarse del siguiente modo: 

Grado 1: esguince sin desgarro del ligamento.
Grado 2: desgarro parcial del ligamento.
Grado 3: desgarro total del ligamento.

  Los ligamentos interiores de la rodilla se llaman ligamento cruzado anterior y ligamento cruzado posterior